Nos vemos en el infierno

Hace dos semanas, el diario brasileño O Globo entrevistó al jefe de una de las bandas de narcotráfico más poderosas de Río. Desde la prisión, este capo dio unas declaraciones escalofriantes sobre el alcance del negocio de la droga y sus consecuencias.
En un momento de la entrevista, el periodista le pregunta sobre la solución al tema del narcotráfico. ¿Solución?- dijo el capo- Mi hermano, no hay solución. La sola idea de una solución ya es un error. Para acabar con nosotros deberían usar una bomba atómica sobre las 520 villas miseria de Río. Oigan, ustedes no entienden la extensión del problema.
No sé si en la Rep. Dominicana alguien ha llegado a darse cuenta del alcance de este negocio criminal. No sé si aquí hay un interés serio en buscarle soluciones a este tema. Lo que sí sé es que el futuro de este país, de nuestras ciudades, de nuestros hijos va a estar muy unido a lo que le ocurra a los narcodueños de la vida y la muerte que hoy controlan este mercado millonario.
En la entrevista, si ustedes la leen, aparece un hombre que viene del infierno a decirnos: Miren lo que han hecho, ustedes, gobernantes. No supieron invertir en los barrios pobres, se robaron el presupuesto para educación y juventud, para deportes y salud, y nos empujaron a caer en manos de las redes internacionales de la droga. Hoy, ya es tarde para revertir el proceso. Hoy, nos tienen miedo. Hoy somos más poderosos que todos ustedes. Hasta pronto, nos vemos en el infierno.