No es para tanto

A la gente le encanta el can, y mejor si lo pasan por la televisión. El sábado, 5 de octubre, llevaron a un canal de televisión a la joven Marta Heredia, quien cumple un año de privación de libertad en la cárcel de Rafey, en Santiago. Está interna en ese recinto penitencial, cumpliendo la orden de coerción por un año, mientras se le pasa juicio de fondo, acusada de traficar con un kilo y 29 gramos de heroína. Bueno, pues  la joven Marta fue llevada a una presentación musical en el programa de televisión, junto con otras mujeres que cumplen pena en el mismo recinto carcelario que ella. La idea de que se presentara en dicho programa yo la considero buena porque de esta manera muchos jóvenes, que andan jugando con fuego, que están exponiendo sus vidas a la suerte de caer en el narcotráfico, pueden aprender en cabeza ajena y desistir del intento suicida de llegar a ser millonario pasando droga en cajas de zapatos.
La idea de colocar a Marta ante las cámaras, la considero como un deseo de llegar a muchos carajitos que creen que la vida del narcotraficante es muy chula y que nunca pasa nada, que se puede hacer de todo y nunca te agarran. Bueno, pues, la gente le ha caído con todo al procurador Domínguez Brito. Las críticas han puesto en duda el proyecto de la procuraduría porque argumentan que si estaba presa no debe salir a nada del penal. Si a eso vamos, dicen los críticos, debieran sacar a todas las reclusas a dar un paseo por los canales de televisión o a arreglarse el moño en un salón de belleza. Pero, señores, que la muchacha no se ha escapado...todavía sigue recluida, no fue sino a cantar y a dar su testimonio de lo que hizo y el error que cometió. !Oh! y ¿cuál es el miedo?... ¿Se va a quedar libre porque haya ido a un canal de televisión a conceder una entrevista, dentro de un proyecto que la procuraduría está llevando a cabo con el fin de concientizar a la juventud sobre los errores que hay que evitar en la vida?  No es para tanto....no sean inmisericordes con el débil, con el que ha resbalado, dejen que los jueces la juzguen a su tiempo y dejen que sea Dios su juez en lo que ha hecho.No es para tanto....